Ayuda a tu hijo a Crecer, a Ser lo mejor de sí mismo I

Los niños juegan, sin pensar en si pueden romper algo, en si molestan a alguien con su ruido, … en ellos no está el interés de hacer nada malo, ni de faltarte al respeto, ni de molestarte, sólo quieren jugar y juegan. 

Si tu hijo rompe algo por casualidad, tira algo al suelo o se le cae, recuerda que no lo hizo con la intención de hacerlo. Tus palabras tienen mucha influencia sobre ellos y son la causa de muchos traumas, limitaciones e impedimentos para desarrollarse como una persona sana, segura de si misma y con posibilidades de triunfar en el futuro. Además él por si mismo ya se siente bastante mal y sabe que no te va a ser agradable el asunto.

Si amas a tu hijo, que estoy segura de que si, trátalo con respeto, recuerda que lo importante aquí no es tener un trasto más en la casa, es tener una persona feliz y exitosa.

Tu hijo es lo importante no lo que sea que haya roto o lo que sea que haya hecho. Interésate por tu hijo, por sus sentimientos, por sus intenciones, por lo que piensa, conocerlo te ayudará a educarlo más eficientemente y a ser para él lo que necesita que seas para crecer sano, feliz y ser un triunfador nato. No te estoy diciendo que ignores lo sucedido, sólo que busquéis juntos una solución para que él tome consciencia de lo que se puede o no hacer en casa y de los motivos por lo que o siempre se puede hacer lo que a uno le apetecería. Está claro que debe haber unas normas de conducta y deben respetarse, pero comunica debidamente y con respeto. Y acompáñalo a aplicar el nuevo comportamiento.

Si ha roto algo, intentad arreglarlo juntos, si un jarrón se ha roto, compra pegamento e intentad unir los trozos... Si ha

ensuciado algo haz que lo limpie o te ayude a limpiarlo... si está con la adrenalina a tope en lugar de quedaros en casa, salid al jardín, llévalo al parque, iros a dar un paseo o algún lugar que pueda correr, saltar, chillar sin molestar a nadie. Y si no te es posible salir utiliza la técnicas para canalizar esa energía adecuadamente
. Seguro que si paras por un momento lo que estás haciendo y te conectas encontrarás la mejor solución para todos. Tus hijos también necesitan de ti en algún momento, no todo es hacer, hacer y trabajar. Plantéate dedicar al día algún momento para jugar, para observarlo, para escucharlo, para estar para él. Te aseguro que es más importante para él que tú estés por él que no que le pongas una cena de lujo. Mejor un bocadillo y tiempo contigo, que el mejor de los manjares sin ti.

Es importante que no le restes seguridad en sí mismo, sino que la fortalezcas. Nuestras opiniones sobre ellos los afecta muchísimo, debemos tener cuidado con ellas. No sacarás nada positivo, ni constructivo degradando a tu hijo con tus comentarios. Para que tu hijo sea grande debes definirlo así y alicientarlo para que pueda demostrar que lo es. Ten en cuenta que no todo el mundo es hábil en hacer cualquier cosa, que unos tienen sus habilidades en unas cosas y otros en otras. Un pino nació para ser pino, así que así serán sus habilidades, lo que le permitirá ser el mejor pino. Tu hijo igual, él tiene un motivo de ser como es y es perfecto, puede que no sirva para matemáticas pero es un hacha con un pincel en la mano o haciendo el pino, o puede que sea una máquina en cálculo y te suspenda gimnasia, que más da. Es su habilidad y es perfecta, no hay ninguna habilidad mejor ni peor, todas tienen su razón de ser y son iguales de necesarias en nuestra sociedad.

Aunque tú en estos momentos no veas para qué le puede servir eso, no te preocupes. Eso será lo que le haga triunfar en la vida, porque nació para eso. En ocasiones las habilidades de un niño no se captan desde un principio, pero si tu caso es que tu hijo ya muestra interés por temas determinados apóyalo para que se desarrolle en ellos. Y si es adolescente y aún no sabe qué hacer con su vida, no te pongas nervioso/a, ayúdale a relajarse y centrarse para que pueda conectar con su camino. Ayúdale a tener experiencias con personas que son profesionales de aquello que le pueda interesar pero que no sabe si le va a gustar tanto como para dedicarse toda su vida. Deja de creer que para que tu hijo tenga éxito tiene que dedicarse a algo determinado porque sino fracasará. Deja que elija por si mismo aquello que más le gusta hacer en la vida y a tu hijo no le faltará nunca de nada y será “grande en su quehacer”. Cada persona es distinta y tiene unas habilidades propias que otros nos poseen, aliciéntalas en tu hijo y no las juzgues, pues eso es su pasaporte a un gran futuro. 

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