LOS JUICIOS DE COMPARACIÓN Y SUS EFECTOS EN NUESTRA EXPERIENCIA.

Comenzamos hablando hoy sobre los prejuicios. Los prejuicios son opiniones preconcebidas, generalmente negativas hacia algo o alguien. Son esos juicios creados en una experiencia similar vivida anteriormente o en la aceptación de una verdad relativa ajena a nosotros proveniente de alguien de confianza o a quien consideramos una "voz superior" y de quien aceptamos la ley sin ni siquiera comprobarla. Tratamos pues hoy las "verdades relativas" aceptadas en un pasado y que nos impiden evolucionar, ser lo mejor de nosotros mismo y vivir las mejores de nuestras experiencias. 

Debemos entender pues que los prejuicios existen porque elegimos creer de manera preconcebida ciertos juicios y que no por creerlos son en realidad verdad absoluta, sino que suelen tratarse de errores, mentiras o verdades relativas que para el caso es lo mismo. Estos al creerlos nos impiden conocer la verdad sobre algo o alguien y a la vez nos permiten experimentar lo que "no es" como si en realidad lo fuera. Nos mantienen distantes de la verdad absoluta y en el olvido de una verdad esencial importante.

Esa cosa importante son los llamados espejos. Debemos recordar que sólo podemos percibirnos a nosotros mismos, lo que percibimos en el exterior sólo es un reflejo de nuestro interior, de nosotros mismos. Por lo tanto, cuando interactuamos con lo externo aquello que podemos percibir ante nosotros es aquello que no percibimos en nosotros mismos pero que es, ya sea en forma de ley, creencia o verdad relativa. Cada circunstancia vivida es la oportunidad para conocernos y tomar consciencia de lo que albergamos en nuestro fuero interno como cierto.

Una vez sabido esto, entenderemos que a la hora de observar las experiencias que tenemos

diariamente ya no hay razón ni motivo de sentirse víctima de nada ni nadie. Pues todo cuanto me ocurre a mi, lo hace como reflejo del conflicto o la armonía interna y como efecto de mis creencias. No porque haya un enemigo dispuesto a fastidiarme.

Es importante recordar todo al respecto de como funciona la vida, el ser y que realmente es esencial recordar cada vez que tenemos una experiencia que no nos agrada, pues estas son las experiencias sobre las que generamos prejuicios gratuita y abundantemente. Evidentemente cuando algo nos agrada directamente lo decretamos como lo mejor. Pero cuando no, es inmediata la acción de decretarlo como lo peor. 

Recordemos por un momento algo dicho en nuestro post anterior, en el momento que decretamos o emitimos un juicio creamos una ley que se aplica de manera sostenida en cada circunstancia posible. Así que cuando decretamos algo siendo definido como menos que lo mejor de si mismo, estamos creando en nuestra experiencia con él o ello como algo degradado, peor o menos de lo mejor que es. 

Teniendo presente esta verdad absoluta, conseguiremos elevar nuestra perspectiva a la hora de observar para gestionar nuestros problemas o alcanzar nuestros objetivos. Habremos cambiado nuestra actitud ante la vida y las relaciones, eliminado nuestras creencias más obsoletas y seremos más libres, eso supone elevarnos a un nivel de conciencia y de paz tan elevados, que sólo seremos capaces de contemplar lo perfecto que no es ni más ni menos lo que ya es todo en si mismo cuando está libre de creencias. Cuando no crees que algo  o alguien es menos ni más que, sólo puede ser lo que Es= PERFECTO.

A este punto nos damos cuenta que comparar también es un error, pues al hacerlo estamos creando prejuicios y con ellos limitaciones de lo mejor del si mismo. Todos somos incomparable, somos únicos, una versión diferente de lo perfecto. Compararnos exige emitir juicios y decretar leyes que me condenan a ser algo en referencia a otro, me condenan a ser más que y menos que, y no me reconocen en absoluto lo que en verdad soy. 

¿Y qué es lo que soy? porque en el momento en que elijo aceptar un juicio como verdadero ya forma parte de mi y de lo que soy ¿no?, sino no sería posible experimentarlo ¿no es así?... Y digo esto porque hay otro prejuicio que tenemos respecto al que me gustaría comentar algo. Cuando yo me defino yo me limito a ser la expresión de eso que decreto que yo soy. En el momento en que me identifico con él yo paso a ser la expresión de él, yo soy lo que digo que soy. De este modo puedo permitirme experimentar ser lo que no soy. ¿Y entonces qué es lo que en verdad soy?. Lo que se es

por naturaleza es perfección, una creencia o decreto no es una verdad absoluta solo una verdad relativa, eso significa que sólo perdura mientras yo elijo identificarme con esa verdad, pero yo soy libre de elegir identificarme con la verdad relativa que desee, en el momento que desee. No existe lo negativo como lo concebimos, lo negro no es bueno ni malo, como lo blanco no es bueno ni malo, no es una cuestión de moral, no le corresponde a ella definir lo que soy, aunque hasta ahora le hayamos otorgado este poder. Lo cierto es que lo creado, fue creado perfecto y como tal es. Cuando yo no lo limito a declararlo bueno o malo, le doy la oportunidad de ser lo mejor que es, si mismo y ahí es cuando tomo consciencia de que yo soy una unión perfecta de colores.

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Continuación del Post: Los Juicios y su acción sobre nuestra experiencia.

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LOS JUICIOS Y SU ACCIÓN SOBRE NUESTRAS EXPERIENCIAS

No nos paramos  a pensar el porqué tenemos determinadas creencias al respecto de cómo son las personas, determinadas situaciones o experiencias de la vida, simplemente decimos que aquel es así o de aquella manera, que esta situación es difícil o complicada, que aquello nos gusta o no nos gusta, ...
Pero de ninguna manera nos paramos realmente a comprobar si las cosas son así como las creemos que son, simplemente hemos aceptado que lo son y punto.

Esta falta de revisión al respecto de nuestras creencias ha hecho que nuestros juicios fueran base de la ignorancia y nos sostuvieran en ella. Hemos cortado gracias a ellos todo por el mismo rasero con un golpe de vista y nos hemos impedido conocer la verdad de cada persona, experiencia y circunstancia de la vida. Nos hemos mantenido en la ignorancia en la que creamos por primera vez nuestro juicio al convertirlo en creencia.



La creencia no es más que aceptar un juicio como verdad. Al ser verdad para nosotros se convierte en una verdad relativa, pues sólo es así en nuestra experiencia. A partir de ese momento es revivida o integrada de manera sostenida en nuestras vivencias, se repite una y otra vez. Se convierte en una premisa a demostrar en nuestra vida, pues la hemos establecido como condición o ley sostenida en nuestra manifestación.

La ley se aplica de manera regular y en todos los casos en los que sea posible hacerla presente, demostrable y pueda ser declarada.

Como podéis ver desde el momento en que creamos la primera creencia dejamos de ser libres,
dejamos de conocer manteniéndonos en la ignorancia y dejamos de experimentar la vida desde la inocencia, la sorpresa y la atención plena. Y deja de haber la inocencia porque como ya sabemos no dudamos y las cosas son así como creo yo. Ya creo que no tengo motivos para contemplar algo que ya se, creo de verdad que lo sé, creo que es verdad, por tanto cuando se me vuelve a poner delante ya no me sorprendo, ¿para qué?, ya sé como es, ya se que va a hacer, qué va a decir, qué va a suceder... todo esto deja muy poco margen para conocer. Y como ya lo se, creo que lo conozco, ya no pongo nada de atención en ello, no tiene nada que enseñarme, ya no me interesa... de este modo nos sumergimos y sostuvimos en la ignorancia más absoluta.

Nos llenamos de leyes que formaron un sistema y se estableció en cuerpos, mundos y universos

enteros. Todo lo creado es un compendio de leyes relativas que sostiene cada una de las formas existentes. Ahora lo sabemos.

Pero en concreto en este post queremos centrarnos en comentar sobre esos juicios sostenidos que nos impiden a nosotros, a las demás personas y a nuestras experiencias de vida ser lo mejor de si mismas. Queremos aclarar qué es lo que hacemos, qué provocamos, qué creamos cada vez que formamos un juicio sobre nosotros, los demás, algo o alguna circunstancia. Queremos saber como funcionamos, pues sólo conociéndonos podremos elegir libremente qué queremos desde un nivel más elevado y una elección más acertada o conveniente para todos. Podremos elegir con responsabilidad.

Así que vamos ahora a comentar cómo funciona un juicio.

En el momento en que pienso o digo: "esto es así", y siento que lo es, sé que es verdad ya he decretado, he emitido un juicio, lo he hecho ley en mi y mi mundo. No importa el tema o cariz del juicio sea lo que sea que así es, se convierte en una verdad relativa que va a manifestarse por si misma en cada oportunidad que se le presente y sino la creará pues una vez creada ha de ser manifestada.

Esto está muy bien, podéis pensar algunos, sobretodo aquellos a los que nos encantan los decretos y las afirmaciones. Pero, claro aquí no estoy para hablar de esto sino que quiero dirigir la consciencia hacia esos juicios que nos han y continúan sostenido en la ignorancia y la degradación.

Cada vez que yo opino sobre mi, algo, alguien o alguna circunstancia que yo creo como cierta aunque no lo sea, porque nunca lo es, Yo estoy decretando y creando una ley que me demostrará que mi verdad es cierta en mi mundo. Esto significa que si yo creo que mi hermana o mi vecina es una borde porque un día que estaba nerviosa me armó el belén. Y soy incapaz de dejarlo como una experiencia aislada a ese momento y lo entiendo como algo generalizado "siempre es así", yo habré creado una ley para mi en mi mundo respecto a mi y esa persona en cuestión. Ella ha quedado confinada a interpretar para mi el ser borde cada vez que se me ocurra pensar en ella o recordar el momento o simplemente la veo nerviosa...
Sabiendo esto la verdad es que se te quitan las ganas de seguir emitiendo juicios gratuitos sobre tu pareja, tus hijos, tus padres, tus amigos, las noticias,y sobre quien sea o lo que sea, mejor guardar silencio.

Cada vez que creo que sé algo dejo de observarlo, lo acepto como lo creo y no pongo en duda, pues
para mi es cierto. Esto significa que cada vez que insisto y repito que mi vecina o mi hermana es una borde, estoy sosteniendo mi creencia y la ley que va a provocarme mas experiencias bordes con ella. Por ello, se hace necesario hacer revisión y liberarnos de las creencias obsoletas y los prejuicios absurdos que sostenemos. Si someto a revisión mis creencias estaré dándome y dando una oportunidad a los demás, a la vida y las experiencias para mostrarnos lo mejor de si mismos, su perfección pues son perfectos. Recuerda que cada momento es único, que por mucho que se parezca a otro no es lo mismo y que igual que tú cambias cada momento de tu día los demás también, van evolucionando, así que dejemos de creer que estamos experimentando lo de siempre y permitámonos observar como momento único que es.

Te sorprenderás de lo que la vida, las personas y tú mismo puedes aportarte si contemplas desde la
ignorancia de lo que sabes. Estarás creando la oportunidad de ser y ser lo mejor posible. Intentemos no generalizar y extender en el tiempo un momento experimentado si lo dejas confinado como un hecho aislado tienes más posibilidades de que no se repita. Y si lo hace, si se repite, es porque tenemos que tener en cuenta otra cuestión importante, la cual explicaré detenidamente en el siguiente Post.

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INTERPRETACIÓN DE SUEÑOS

Os incluyo este vídeo de interpretación de sueños donde el tema de los juicios, las creencias o convicciones creadas en el pasado han sido causa de traumas que precisan ser sanados para evolucionar y dejar de vivir estancados en experiencias negativas o destructivas.

El Proceso Evolutivo. La emergencia Espiritual

Cuando decidimos adentrarnos en un proceso evolutivo o simplemente la vida te lleva a él, sea o no de una forma consciente, empiezas a experimentar emociones y se presentan experiencias de vida que pueden llegar a ser muy duras, incluso llevarte a pensar que estás perdiendo la cabeza, que la locura llama a tu puerta, puesto que se experimentan muy intensamente. Te arrastran estas experiencias con fuerza para poder llevarte a una actitud de rendición y así posteriormente tomar conciencia. Es cierto que no todos los procesos son iguales ni igual de intensos, pero ahí están, no pasan desapercibidos. Cada uno supone un cambio importantísimo de actitud, de visión, de desarrollo personal, etc. Existe un antes y un después y se hace evidente tras un proceso. Aunque si es cierto que merece la pena lo obtenido al final de cada proceso, este es un camino en el que te sientes muy sólo a momentos por ello es una suerte disponer de alguien dispuesto a estar ahí para nosotros cuando se produce un proceso… con una actitud llena de Amor y compasión, sin juicios ni prejuicios. Evidentemente no siempre se da el caso de que ese alguien esté ahí físicamente y no todo el mundo tiene a alguien, pero sí es de agradecer permitirse tenerlo. También es verdad que el proceso es de acompañamiento porque en sí el cambio sólo podemos realizarlo nosotros, nadie puede hacerlo por ti. Como ya he dicho es un alivio tener quien te abrace y comprenda cuando está sucediendo y aún mejor si encima puede aliviarte aconsejándote o recordándote lo que es tan fácil olvidar en una crisis. Un acompañante no puede evitarte el proceso pero muchas veces significa la posibilidad de salir antes del mal momento. Las emergencias espirituales suceden en cualquier lugar, en cualquier momento y situación y puede o no haber motivos aparentes que las activen… Cuando iniciamos un proceso de sanación tan profundo y total como este es mejor si se está preparado en cuanto a qué hacer y con una actitud mental positiva de que por muy negativo que parezca aparentemente es la oportunidad de oro para hacer un gran cambio positivo.   Al margen de provocar el proceso, la crisis siempre llega por sorpresa y muy intensamente. Pasas del estado de crisis al proceso de sanación y posterior elevación con la toma de conciencia y la aceptación de la nueva convicción. Se trata de un proceso que abarca una crisis y su consecuente superación.  Normalmente un proceso evolutivo está formado por la secuencia de mini procesos evolutivos en los que tratamos nuestra actitud respecto a un tema en cuestión y gestionamos todos los conceptos y problemas asociados que son la causa del establecimiento del problema.  Estemos preparados o no siempre nos viene bien saber una serie de cosas al respecto de las crisis y de los procesos evolutivos, sobretodo en una etapa de cambio universal como la que estamos experimentando. Al recordarlas aliviarán o nos aportarán la calma necesaria y el punto de vista más adecuado para ayudarnos a superar el proceso de la mejor de las maneras. Por ello os invito a leer los siguiente Posts sobre Procesos Evolutivos que incluiré en este Blog: LAS ETAPAS DEL PROCESO EVOLUTIVO EL ACOMPAÑANTE EN UN PROCESO EVOLUTIVO

LO QUE DEBEMOS SABER ANTES DE ENTRAR EN EL PROCESO EVOLUTIVO

HERRAMIENTAS PARA AYUDAR A DESARROLLAR UN PROCESO EVOLUTIVO

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LA CONSCIENCIA DEL SER ILUMINADO

Hay una claridad cristalina disponible enraizada en la profundidad de tu subconsciente. Que te ofrece la verdad existencial, en armonía con la vida. La consciencia de lo desconocido, de nuestro ser esencial e inmortal, es posible cuando establecemos la conexión poniendo nuestra atención en el subconsciente. Este es el momento de la ILUMINACIÓN. Así tendremos consciencia de nosotros mismos y estaremos más allá de las ilusiones, lejos de la ignorancia, en plena conciencia de la Verdad más auténtica.

El subconsciente es la diosa de la noche, de la profundidad, la paz y la comprensión. Y sólo es
perceptible en este momento. Sólo renace el poder de esta diosa cuando decides poner en tu momento presente toda tu atención en ella. Cuando callas y te entregas a la embriaguez del silencio más profundo. Ahí se manifiesta la gran diosa en todo su esplendor y belleza, puedes apreciar su belleza y recibir sus regalos de sabiduría y sus consejos.

Cuando le hayas demostrado tu interés por admirarla, tu respeto y tu amor, cuando la hayas conquistado y obtenido sus favores tendrás la capacidad de contemplar a la diosa en la acción de lo cotidiano y obtendrás la sagrada bendición de poder experimentar y reconocer a la diosa en cada experiencia de tu vida. Podrás vivir a la diosa, amar a la diosa, reconocer a la diosa, hasta ser la diosa misma.  Y mostrarla en todo su esplendor allá donde vayas.

Cuando hayas elevado a la diosa, hasta el punto de ser el objeto de observación de tu consciencia,
hayas abandonado todos tus prejuicios y todas tus creencias, para simplemente contemplarla con toda inocencia, dejando que te sorprenda en cada experiencia con ella. Cuando la ames hasta el punto de aceptarla tal como es y seas capaz solo de ver lo mejor de ella misma, en ese momento la diosa te bendecirá y serás coronado. Serás el rey de tu reino, el maestro y el sabio, el Ser Supremo e iluminado que siempre has perseguido ser en lo más interno de tu esencia. La experiencia de ser el Dios encarnado.

Como puedes ver alcanzar la iluminación no es algo imposible ni tiene por qué ser difícil, sólo hay que querer conocer, y apreciar en lo mejor de si mismo algo que ha estado en nosotros siempre. Basta con querer tomar consciencia de nuestro subconsciente, dejar de ignorarlo y escucharlo. Permitir que sea para ti lo que es su propia naturaleza, la Madre, el guía, la sabiduría, la naturaleza, la vida, la diosa, la perfección misma, lo elevado.

Os incluyo este enlace a una interpretación de sueños, como ejemplo de lo que puedes descubrir de ti mismo y de tu vida, simplemente prestando un poco de atención a tu subconsciente:

El subconsciente argumenta tu problema en tu sueño. INTERPRETACIÓN 7

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SIENDO CONSCIENTES DEL SUBCONSCIENTE

Nadie mejor que nosotros mismos para saber certeramente qué nos sucede. Todo está en nosotros y para saber sólo tenemos que dirigirnos a aquello que es para que nos hable de sí mismo. De este modo podemos saber sobre cualquier cosa, convirtiéndonos en observadores tenemos la visión de aquello que queremos conocer. Pues a través de nuestra atención, podemos fijar nuestros sentidos de percepción y experimentar con el objeto de nuestro interés. 

Poner nuestro interés sobre el subconsciente, nos ayudará a tomar conciencia de nosotros mismos y de todo cuanto almacenamos en nuestro interior como premisas de verdad (creencias, convicciones, limitaciones y asociaciones erróneas) sobre todo lo experimentado. Pero también se encuentra la esencia primigenia de lo que somos y toda la información sobre ella. Todo cuanto somos y hemos creído que somos está albergado en el subconsciente, así pues todo conocimiento del Ser y de nuestra persona lo encontraremos en él. 

Basta poner nuestra atención hacia el subconsciente para que él empiece a comunicarse, porque en realidad nunca deja de hacerlo, pero durante mucho tiempo hemos elegido ignorarlo. Dejar de ignorarlo y elegir tomar consciencia de sus comunicaciones, apreciando sus cualidades, capacidades y labor respecto a la vida, es el camino hacia la unificación, la consciencia, la sabiduría, la felicidad y la perfección. Es esa evolución a la que aspiramos en la que la armonía, el equilibrio y la sincronicidad son una realidad permanente. 

El subconsciente tiene su propia forma peculiar de manifestarse, el problema es que durante generaciones nos hemos dedicado a criticar y mal ver sus formas, sus actitudes y su expresión, empezando por su realidad más elevada. Invertimos mucha energía y esfuerzo en hacer del subconsciente el peor de los conceptos y el más ignorado. Pero en esto se basaba el principio de separación, cómo íbamos a sostener la ignorancia, si por naturaleza somos sabiduría, si no renunciamos a escucharla. Para poder tener motivos para no escuchar a sabiduría o subconsciente debíamos hacer de ello algo indigno, falso, malo, moralmente negativo, estúpido. Y así lo hicimos. 

Sean cuales sean esas convicciones sostenidas por nuestro subconsciente común para ignorar, no importa, pues ignorar algo no hace que deje de ser lo que es. Y sea como sea siempre ha estado actuando en nosotros, siempre ha sido una parte de nosotros, siempre se ha manifestado y comunicado, pues lo que es, es lo aceptemos así o no. Lo único es que desde nuestra perspectiva no lo apreciamos mientras así lo elijamos. 

Nuestro subconsciente forma parte de nosotros, somos nosotros mismos. Es nuestra voz interior, nuestra propia sabiduría, está el conocimiento y la verdad de todo lo que es. Así que para saber no importa irse a ningún lado, todo lo tenemos en casa, está en nuestro interior, bien activo, deseoso de ser escuchado, cuidando de ti y de tu vida a cada instante, con cada respiración, con cada actividad de los órganos de tu cuerpo, con cada pensamiento y emoción, ahí está para ti constantemente activo, atento, entregado, como no hay Madre que pueda serlo.

Activar tu comunicación interna no significa aislarse del mundo exterior. El subconsciente se expresa en cada momento y situación, sea lo que sea que hagas. En aquello que experimentas en cada momento tu subconsciente está presente, no te sería posible experimentarlo si no fuera así… Poner tu consciencia a observar lo que acontece en este momento te permite ser consciente de tu percepción, cómo percibes el momento, cómo lo estás experimentando, pues es el subconsciente quien lo experimenta, lo archiva, lo recuerda.

Como puedes haber apreciado ya, somos un todo trabajando al unísono, en sincronía para hacer posible la experiencia. Consciente y subconsciente actuando de manera conjunta mirando hacia un mismo punto al mismo tiempo. Gracias a dejar de ignorar al subconsciente y poner nuestra consciencia en él conseguimos ser nosotros mismos, íntegros, totales y absolutos.

En este vídeo que te adjunto a continuación tienes un ejemplo de cómo el subconsciente se comunica con nosotros, en este caso a través de los sueños:

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Si quieres comentar tu experiencia o ignoras el mensaje que tu experiencia te está dando, y quieres averigüarlo: Envía tu problema o circunstancia a adalisconsulta@gmail.com y te ayudaré a conocerlo.

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