sábado, 28 de mayo de 2016

RELACIONES DE PACTO


Cada una de las relaciones que sostenemos desde que nacemos hasta que morimos, son relaciones predeterminadas antes de nacer, que en un acto de Amor consideraron en acuerdo con nosotros mismos de llevar adelante su rol para que ambos pudiéramos vivir experiencias determinadas. Porque claro, ¿cómo íbamos a poder saber qué se siente teniendo una madre exigente, si no interpretan para nosotros ese papel?, ¿cómo podríamos saber qué se siente cuando nos insultan si no hay alguien que lo hace?… ¿Cómo saber qué se siente siendo madre, si no hay un voluntario que haga de hijo?…

El tema es que en esas relaciones no siempre nos hacemos conscientes de todo cuanto deberíamos, por lo que acabamos generando temas pendientes que obligan a esa relación a sostenerse en el tiempo y el espacio. Son las llamadas “Relaciones de Pacto”, que generan obligación de sostener circunstancias y roles repetitivos y estancados. Es decir, que una y otra vez nos encontramos para volver a experimentar situaciones similares que nos dan la oportunidad de evolucionar, en la comprensión del concepto y la toma de conciencia de la finalidad de dicha relación o de la experiencia compartida. Esto da respuesta al tema de la existencia del Karma. Pues el karma no es más que un cúmulo de experiencias sostenidas en el tiempo y el espacio que nos dan la oportunidad de poder conocer y evolucionar, y que se repiten hasta que con éxito logras reconocerlas en su verdad, más allá de las apariencias.

Cuántas veces no has pensado que deseas finalizar una relación o aborreces simplemente las circunstancias que te toca vivir con ella y quieres que se acabe, sin embargo, persisten y se sostienen inamovibles a tu lado, reapareciendo una y otra vez. O cuántas veces no has roto relaciones porque traían a tu experiencia situaciones dolorosas similares y sin embargo acababas con una y comenzabas con otra peor… 
Ante estas situaciones que se repiten es necesario poner solución, y un camino para poder gestionarlas para que dejen de ser una carga o una lacra en nuestra vida. Es el momento de responsabilizarnos de nuestra propia vida y hacer algo al respecto. 
Por ello, os incluyo, a continuación, esta técnica que te permite LIBERAR RELACIONES DE PACTO, para permitir relaciones más libres, basadas en el Amor Incondicional, en las que cada parte pueda ser lo mejor de sí mismo. 





Si quieres comentar tu experiencia o ignoras el mensaje que tu experiencia te está dando, y quieres averigüarlo: Envía tu problema o circunstancia a adalisconsulta@gmail.com y te ayudaré a conocerlo.

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martes, 24 de mayo de 2016

LA VIDA ES SUEÑO. La Vida al igual que el sueño debe ser adecuadamente interpretada.

  


Sin duda alguna la Vida es Sueño, parece una cosa pero en realidad es otra. Te preguntarás porqué una y otra vez parecen repetirse las mismas historias en tu vida y no acabas de comprender por qué o qué has hecho mal. Y es fácil la respuesta, no hiciste nada mal, únicamente ignoraste el mensaje que el subconsciente te estaba enviando a través de tu experiencia de vida, por ello, lo repite y repite hasta que seas capaz de pararte a escuchar. No escuchar a nuestro propio subconsciente es lo que hizo que una y otra experiencia de vida se acumulara para una próxima exposición a la consciencia, que al ser ignoradas una, otra y otra vez constituyeron el problema del karma, además de la carga consecuente sobre nuestras espaldas.
Así que en esta etapa del cambio no es de extrañar que gran parte del trabajo se base en ponernos bien delante cada experiencia ignorada y dejarlas de ignorar para poder ver con claridad que mensaje nos pasamos por alto de nuestro subconsciente. Que repite paciente e insistentemente lo que hicimos de él. La atención y la escucha son necesarias para hacernos conscientes y poder vivir libremente eligiendo responsablemente las premisas que elegimos sustentar. 


El subconsciente nos muestra las experiencias de vida en base a todo el sistema de asociaciones mentales que aceptamos como verdaderas y que consolidan nuestras creencias. Y en esas experiencias nos permite experimentar la creencia en la realidad como cierta. No importa cual sea la premisa que elijamos experimentar o cuanto se distancie de la verdad auténtica del ser o de la existencia misma. En nada, el subconsciente, nos monta el escenario con todas las cosas que elegimos creer que son. El sueño se vuelve una oportunidad para vivir real una experiencia de algo que de otro modo no podría ser experimentado porque no es auténtico, es aparente. 

¿Entonces en qué se basa el subconsciente para crear tales apariencias?. En realidad ya lo contestamos, en base a lo que en nuestro interior es sostenido, creído. El subconsciente nos representa cada una de las premisas, juicios, creencias o convicciones que albergamos en nosotros. Así que, estar atentos nos da la oportunidad de revisión de cada una de ellas, de este modo podemos elegir seguir sosteniéndolas o cambiarlas por otras. Un proceso evolutivo se basa en elevar al subconsciente a observación, en la revisión de aquellos conceptos ignorados que al permitirnos observarlos y conocerlos dejan de ser ignorados para ser conocidos. Desde el conocimiento nuestras elecciones evidentemente son distintas y en función de ellas nuestras creencias cambian y en consecuencia las experiencias de vida. Queda explicada pues la premisa del Cambio que afirma que para instaurar un cambio en el mundo primero hay que instaurar el cambio en uno mismo. 

El tema es que el sueño es experimentado tan real, tan sentido, que nos resulta difícil aceptar que nuestras experiencias de vida son el sueño del que hablábamos, mucho menos que son el reflejo de nosotros mismos. Hemos ignorado tanto esta verdad, que hemos creído que somos ajenos a lo que sucede en la vida, que no depende de nosotros, que es creada por algo externo y ajeno. Creencias originadas por la experiencia relativa y el concepto de lo diferente, abrieron todo un mundo de posibilidades de experimentación limitada a los conceptos (con etiqueta objeto, sin etiqueta nada).

Así se asentaron las creencias del destino, la suerte, la muerte, etc. Así creamos la percepción del Yo y el Tú, el adentro y afuera, el ser y el no ser, el consciente y el subconsciente… En la observación de la diferencia se derivaron en el prejuicio degradado: lo inferior y lo superior, lo mejor y lo peor, lo bueno y lo malo, lo auténtico y lo falso, etc. llegando a ignorar al subconsciente, haciendo de él no sólo un apartado diferente, sino indigno de prestarle atención, porque sus mensajes son tonterías, sueños, fantasía e ilusión.
En medio de tanta etiqueta, filtros y normas generadas por las asociaciones entre conceptos se nos hizo irreconocible el mensaje original. Y ahora, cuando nos sucede algo con la vida, con algo o alguien creemos que ello es lo culpable de lo que nos sucede porque se nos ocurrió un día creer que eran algo diferente a mi mismo e independiente. 

Nuestra labor ahora es cambiar, aprender a reconocer la voz del subconsciente y su significado.

Si quieres dejar de ignorar el mensaje que tu vida te está dando y tomar consciencia de tu voz interior ponte en contacto conmigo en adalisconsulta@gmail.com. Si tienes una situación difícil entre manos envía tu problema o circunstancia a adalis.ayuda@gmail.com y te ayudaré a conocer el mensaje subconsciente y superar el conflicto. También puedes ponerte en contacto por whatsApp: 696 158 128.

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domingo, 22 de mayo de 2016

MEDITACIÓN Y SUEÑOS

En la meditación reproducimos estados del sueño, sosteniendo relativamente una conciencia despierta. De este modo "abrimos la puerta” o “conectamos” con nuestro subconsciente de forma abierta, directa y consciente. Es normal pues recibir con más facilidad los mensajes que nuestro subconsciente tiene para nosotros, es decir, podemos comunicarnos con él, sostener la comunicación, hacer preguntas y recibir respuestas, modificar programaciones obsoletas,  liberar o gestionar todo tipo de traumas o emociones y eliminar convicciones erróneas de una forma sencilla. 

Ya sea que conectes con tu subconsciente a través de la Meditación o a través del sueño, los mensajes que recibes son directamente de tu subconsciente, así que los símbolos que aparecen tanto en los sueños como en las meditaciones disponen exactamente las mismas interpretaciones. Pues el que se comunica a través es el mismo: el Subconsciente. 

No se trata de aprender el lenguaje de los sueños, sino de reconocer el diálogo del subconsciente y “aprender” a interpretarlo. En realidad más que aprender lo que hacemos es recordar lo olvidado. Pues no siempre nos mantuvimos ajenos a su manifestación desde una perspectiva consciente. Esto ocurrió cuando decidimos valorar a la consciencia por encima del subconsciente apartando a este último a un lado ignorándolo. En ese "no querer saber “ nada relativo a las manifestaciones que no fueran estrictamente científicas, lógicas y detectables en la realidad, creamos una barrera en la comunicación con nosotros mismos y generamos un sin fin de cargas y traumas emocionales en cada intento del subconsciente de comunicarse y cada negativa desde la conciencia a escuchar. 

La meditación te permite integrar en una misma acción: una acción consciente con la subconsciente. Lo mismo ocurre con los sueños que la consciencia recuerda: son una oportunidad de llevar a la consciencia el mensaje del subconsciente, integran una acción subconsciente con una consciente. De este modo tenemos establecido el contacto. 

Es por este motivo que se nos hace tan necesario en estos tiempos de evolución la meditación y el análisis de sueños, pues son las vías por la que recuperar el diálogo entre la consciencia y el subconsciente. Son las vías por las que hacer las paces con nosotros mismos y dejar de vivir en la lucha. Son el modo perfecto de hacer la Paz en el mundo, pues cuando en uno mismo armonizamos esta relación entre el consciente y el subconsciente tomamos el mando de nuestro Ser y también de nuestra Creación. Estamos atrayendo a nuestra alma gemela hacia nosotros o lo que es lo mismo restableciendo el Amor que hay en nosotros. Deja de haber bueno y malo, ya no hay nadie a quien juzgar, ni criticar, nadie es menos  ni más, sino que es lo que es, lo mismo, Sí mismo.


Abrir el diálogo e instaurar la paz, el respeto y la aceptación en esta relación entre el consciente y el subconsciente, es el camino hacia la colaboración, la complementariedad. Una vez instaurada la paz y la armonía de las partes que ya no luchan sino que se complementan, entonces podremos dar paso a la verdadera integración, la unificación del Ser.  Pues entenderemos que nunca dejamos de ser nada, sólo lo ignoramos. Ahora saliendo de esa ignorancia somos más conscientes de nosotros mismos y descubrimos que siempre fuimos perfectos, más allá de lo bueno o lo malo, porque no existió lo bueno ni lo malo, ni el ser ni el no ser, sólo lo sabido y lo olvidado, lo consciente y lo subconsciente, es decir, lo que es objeto de mi atención en este momento y lo que no. 

Si quieres dejar de ignorar el mensaje que el subconsciente te está dando, envía tu sueño o mensaje meditativo que no comprendas a adalis.ayuda@gmail.com y te ayudaré a conocer el mensaje, que tu subconsciente está tan ávido de que entiendas.


*Es mi deseo que este artículo haya aportado un poco de luz y reflexión a tu vida, con todo mi Amor deseo te sea útil. 

ADALIS©



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